El humor de los ticos es una vara
rara, puede ser tan histriónico como superficial, tan ingenioso como banal, y
si a esas combinaciones se les une el hecho de que los ticos aun nos seguimos
preguntando por nuestra identidad, a saber, qué putas es lo que nos hace ser
como somos, entonces tenemos un problema, pues la construcción de la identidad
trasciende social y moralmente. Dentro del imaginario social fundamentado en la
chota y el serrucho, la creación de adjetivos burlistas y detractores
corresponde a la principal línea argumentativa a favor del querer-ser del tico.
La construcción de la identidad
del tico en los últimos años ha sido negativa, es decir, nos definimos por lo que
no queremos ser. Tipificamos al polo,
al tierroso y al chata como lo que no queremos ser, la muestra de la ignorancia
y la falta de clase (sic) - porque resulta que para esas varas sí tenemos
conciencia de clase- y todos nos auto
clasificamos como los dueños y señores de la
clase. Parece muy claro que ser polo es ser ignorante, no poseer
conocimiento, no poseer estilo, pero nadie dice nada de cómo es eso de tener
conocimiento y estilo. El método para garantizar nuestra identidad y nuestro
nivel de conocimiento es identificar la medida en que nos alejamos de las
tipificaciones.
Las implicaciones de esto se
reflejan entre otras cosas, en el humor. La película más taquillera de nuestra
historia es la de un personaje campesino (es decir, un mae de zona rural,
porque al campesino que cultiva y trabaja la tierra, nadie lo conoce) que
durante 120 minutos demuestra ser fundamentalmente un tarado, un mae cuyo éxito
corresponde a una suma de suertes y casualidades, circunstancias y trivialidades
que al final responden a presiones corporativas. Michael Jordan es la
tipificación del mae que por no vivir en la ciudad, está condenado a la
estupidez y a las casualidades externas.
En un restaurante un día de estos
veía en la tele a dos personajes con traje típico de campesinos que se metían a
un mall y en cada uno de sus actos, demostraban ser un par de limitados
mentales. No se sabían subir a unas escaleras eléctricas, no podían comunicarse
con nadie fluidamente y sus interacciones con el mundo ¨externo¨, es decir, con
la sociedad, eran torpes y poco fructíferas. ¿Es así el campesino? ¿Un
ignorante, un clown, un idiota? No los campesinos que yo conozco. Los que yo
conozco hablan vacilón y toda la cosa, pero idiotas no son.
Resulta que en el imaginario tico
queremos evitar ser polos, chatas o tierrosos, es decir, ser de esos maes que
se ilusionan viendo programillas super light y sexistas, todos odian Combate,
Intrusos, todos odian Sábado Gigante, todos odian la música del Rookie y de
Latin Fresh, todos odian a Justin Bieber tanto como a Melissa Mora, todos odian
a Toledo y odian al mae que se viste con los pantalones por la mitad de las
nalgas, todos odian a la doñita pola que se toma fotos con el árbol de navidad
de Multiplaza, al tierroso que se toma fotos en el gym y las publica en el
face, todos odian a la tierrosa que usa shorts cortísimos y se toma selfies
haciendo cara de pato… Todos tienen muy claro lo que odian, pero todos fueron a
ver a Michael Jordan de viaje perdido
y se cagaron de risa, y todos ven los sketches del par de idiotas del chinamo,
y todos fueron a Palmares y a Zapote y todos fueron a comprar al Lincoln Plaza
en viernes negro.
Antes de que empiecen a brincar
los que dicen: ¨No, yo no hice nada de eso¨, quiero aclarar que el punto es más
que todo resaltar que los elementos que usamos para construir la identidad son
contradictorios y falsos, dan una idea equivocada de lo que somos, y lo que es
peor, son masivos, convencionales y están dejando su germen en la moral del
tico. ¿Por qué nos hace gracia Michael Jordan? ¿Es acaso gracioso (en caso de
que fuera cierto) que un tico sea abusado por intereses corporativos, que
llegue a Francia a provocar lástima, que no tenga herramientas ni educación
para encontrar un trabajo? ¿Es gracioso que un tico no tenga otra forma de
salir de sus problemas más que dependiendo de propinas, lástima y casualidades?
Diay… estamos bien hechos mierda si eso nos causa risa…
Cierro con un par de preguntas
cuyas respuestas no tengo: Aparte de comer gallo pinto, ser ¨el país más feliz
del mundo¨, decir pura vida y ver el chinamo ¿Qué putas hace que el tico sea
tico? ¿Qué nos caracteriza, dónde está nuestra identidad?